Cuestión de gustos

La de los días de lluvia siempre ha sido la ropa que menos me ha gustado. ¿Por qué preocuparnos por los colores si nadie se va a parar a mirarla? ¡Maldita sea! Yo me pararía.

En esos días en blanco y negro cualquier cosa viene bien para reavivar el alma. Pero no, tenían que vestir siempre esas ropas de colores inertes que no hacían más que empeorar el estado de ánimo de la gente.

Ya sé que la lluvia ácida corroe los tonos llamativos, pero ¿acaso no sería bonito ver un poco de color en este mundo muerto aunque sólo fuese durante un momento?

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Aquí tenéis mi propuesta de esta semana para el concurso de Relatos en Cadena de la radio.

Esta vez he vuelto a temáticas más propias de mí como mi propia novia comentó tras leerlo, así que no se si conseguiré sorprenderos a muchos con él :S